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Cuando la educación de los hijos «fracasa»

Cuando la educación de los hijos «fracasa» / Los mitos de la paternidad

Hace un tiempo que preparé estos tips, pero no había encontrado el momento de sacarlos. Como me habéis pedido tips, ahí van estas ideas por si os ayudan.
Ya os digo, nosotros estamos en ello, no somos ejemplo en nada, pero seguimos intentándolo :
1. No tirar la toalla: A veces nos desesperamos y pensamos que lo que hacemos no sirve para nada, no aprenden, no cambian la forma de hacer las cosas, de pedirlas, nos gustaría que fueran más educados. Aún así, volvemos a intentarlo. Antes o después se verán los frutos (espero ).
2. Creatividad: Cosas que pensamos que van a funcionar no lo hacen o no tienen los resultados que queríamos. Ser creativos y seguir probando distintas acciones pueden provocar resultados distintos, y al fin dar con algo que funcione. Imaginación al poder! Ser creativos y no obcecarse con algo.
3. Paciencia: Con ellos y con nosotros mismos. Diría que ambas son muy importantes, pero destacaría la paciencia con nosotros mismos, cuando vemos que volvemos a fallar o a caer en lo que no nos gusta hacer (gritos, enfados, etc). Ser pacientes con nosotros mismos, perdonarnos y volverlo a intentar.
4. Perseverancia: Siempre intentamos ser constantes en aquellas acciones que creemos que son buenas, aunque nos cueste. Ser coherentes con lo que decimos y hacemos. Ser firmes en nuestras decisiones, y flexibles cuando consideremos necesario. La coherencia y la perseverancia son dos grandes virtudes en la educación.
5. Buen ánimo: El cansancio, nuestro y de los peques, no es buen compañero, y muchas veces hará que no tengamos el ánimo suficiente para poner buena cara frente a la adversidad. Aún así mi consejo es intentarlo siempre. Y cuando lo logramos, en general la situación mejora. La alegría es una gran compañera. Aprovechémosla.
6. Pedir ayuda: Al marido/mujer, amigos, a un especialista, psicólogo, orientador… Quien nos pueda ayudar en cada circunstancia. Sin miedos y sin prejuicios. El otro a lo mejor tiene la paciencia que tú en ese momento ya no tienes; los amigos tienen sus experiencias; los expertos aportarán consejos. Hay mucha ayuda ahí fuera, aprovéchala.

Y las más importante:
7. Rezar por ellos (y por nosotros)
Y Aquel que nos ha regalado la posibilidad de cuidar a estas personitas, es el que nos puede ayudar. No nos olvidemos de pedirle a Él lo que necesitamos, a nuestra Madre, a los Santos que interceden por todos, y a los ángeles de la guarda (nuestros y de los pequeños). Lo oración de unos padres es muy poderosa.

Y vosotros, ¿con cuál os quedáis? ¿Añadiríais alguna?
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Acerca de Lorena del rey

Católica, consagrada a María, esposa y madre de cuatro hijos pequeños, ambientóloga y friki, evangelizadora donde se tercie. A nivel profesional, responsable del Dpto. de Promoción y Comunicación en Radio María España, emprendedora (El Caminito de los Pequeños), y tesis en curso sobre Educación Ambiental Católica. Profundizando en la teología del Hogar.